Candice Renoir es teniente de la policía, madre de cuatro niños, divorciada. Cuando tras una pausa de diez años en su carrera, regresa para reanudar su servicio en una ciudad portuaria del sur de Francia, se siente algo oxidada. A pesar del desafío que le supone y del cinismo de su superior, quien no le pone las cosas fáciles, está decidida a convertir sus supuestas debilidades en fortalezas, resolviendo los casos más complejos gracias a su sentido común, a su capacidad de observación y a su sentido práctico enriquecido por su agitada rutina diaria. Candice se enfrenta en cada episodio a un nuevo caso, mientras de fondo los espectadores son testigos de su vida familiar y amorosa.